Este año la familia celebra la Nochebuena en casa de Toni; una presión más para Deborah, que sabe que los Alcántara son unos comensales muy exigentes. Toni sigue involucrado en su trabajo de “agente doble”: para la mafia y para la policía. Esta última le encomienda una misión especial. María vuelve del internado para la cena familiar.